Descripción

Santa María de los Llanos es una modesta localidad manchega que basa su economía en el cultivo de la vid, el olivo y el cereal. A pesar de encontrarse en el corazón de La Mancha conquense, el término municipal cuenta con dispersas manchas forestales que ofrecen un paisaje variado.

El sendero señalizado recorre algunos de los parajes o elementos etnográficos más emblemáticos de la población, siendo el paraje de Cerro Agudo, que da nombre al sendero, el más destacado y elevado de todo el término. Destacan también la fuente-abrevadero de El Incosillo o la choza El Tito, si bien, la mayoría de los elementos destacados se encuentran en el casco urbano.

El origen de la población se debe en parte a un hallazgo fortuito, en el que un labrador de Puebla del Aljibe, antiguo asentamiento árabe previo a la ubicación actual, encontró una pequeña imagen de cobre de Santa María. En ese lugar se construyó una pequeña capilla dedicada a la Virgen, que con sucesivas ampliaciones pasó a convertirse en la actual iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción (ss. XIV y XV). De la primitiva construcción tan solo se conserva el ábside de planta semicircular, pero está considerada como la iglesia románica más meridional de la provincia, incluso de España. Destaca también en el seno de la población la ermita del Cristo de la Cruz Cerrada, magnífico ejemplo del barroco popular, una bodega del S. XVIII y dos de los distintos pozos con que cuenta Santa María de los Llanos: el del Aljibe y el de Abajo.

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